Escrito por Jorge Meléndez Preciado / homozapping.com.mx
Es curiosa nuestra época: en cuanto viene una reforma financiera mediana, los millonarios y los empresarios defienden, aparentemente, el derecho al trabajo. Cuando liquidaron a miles de trabajadores electricistas, se congratularon porque desaparecía una industria, afirmaban, onerosa para el país.
Resultó, empero, que la llamada empresa de clase mundial, la CFE, no logró arreglar ni las fallas, ni los apagones frecuentes en la zona centro de la República. Pero se insistió, los de la Compañía de Luz, la cual desarrolló un mexiquense, Adolfo López Mateos, no la hacían, para frasearlo en el lenguaje de los chavos.
Ahora que hay una rectificación gubernamental importante, al aceptar que varios miles tengan una jubilación importante, aunque menos de lo que obtienen los funcionarios medios y los legisladores haraganes. Frente a eso, hay muchos que se rasgan las vestiduras.
Un informativo dijo: “Da Segob regalazo al SME. Recibirán mil 400 trabajadores de LFC un pago vitalicio de 15 mil pesos al mes”. Si ellos cotizaron durante años, estuvieron en el frente para resolver problemas y arriesgaron sus vidas con el objeto de mantenernos alumbrados, no importa. Lo fundamental es que son trabajadores que no deben entorpecer la acumulación de una empresa. Punto.
Y un clásico, Javier Lozano, ex priista, panista y mal pianista censuró que se haga justicia a los trabajadores. Una muestra que el panismo retrógrada y felipista es una lacra social. Este señor, es ahora, dicen informativos, cabildero de televisoras y antes fue el que justificó las tragedias en las minas nacionales.
Un triunfo de los electricistas luego de cuatro años que afortunadamente el gobierno de Peña Nieto logró bien encauzar.
