A cuatro días de realizarse el tradicional Grito de Independencia, el Sindicato Mexicano de Electricista (SME) continúa sin levantar su plantón del Zócalo capitalino.
Aunque este domingo se habló de un posible acuerdo entre los sindicalistas y el Gobierno del Distrito Federal para retirar las carpas y casas de campaña de la Plaza de la Constitución, será hasta hoy por la tarde cuando se reanuden las pláticas con el subsecretario del GDF, Juan José García Ochoa, en busca de un arreglo.
En un recorrido realizado por MILENIO se constató que los inconformes por la extinción de Luz y Fuerza siguen sus actividades cotidianas, como la entrega de trípticos, boteo para recaudar recursos y mantener el plantón e incluso la venta de comida.
En tanto, el secretario de la Comisión de Educación de la Asamblea Legislativa, el panista Juan Carlos Zárraga, criticó la falta de determinación del jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, para retirar el plantón y permitir la celebración del Grito de Independencia.
“Ebrard tuvo miedo de que los chinos se enojaran por prestarle el Zócalo al Dalai Lama, pero no le da miedo que el SME lo tenga como tianguis”, cuestionó.
El asambleísta, quien ofrecerá el posicionamiento de su fracción en el quinto Informe de gobierno de Ebrard, pidió al Ejecutivo local que no “le tiemble la mano” para retirar al SME.
Algunas personas que asistieron al Zócalo también manifestaron su molestia por el campamento.
“Es un arma de dos filos: estorban y deberían quitarlos, pero moverlos puede ocasionar un conflicto mayor; preferimos que ahí se quede”, dijo un transeúnte.
Aunque este domingo se habló de un posible acuerdo entre los sindicalistas y el Gobierno del Distrito Federal para retirar las carpas y casas de campaña de la Plaza de la Constitución, será hasta hoy por la tarde cuando se reanuden las pláticas con el subsecretario del GDF, Juan José García Ochoa, en busca de un arreglo.
En un recorrido realizado por MILENIO se constató que los inconformes por la extinción de Luz y Fuerza siguen sus actividades cotidianas, como la entrega de trípticos, boteo para recaudar recursos y mantener el plantón e incluso la venta de comida.
En tanto, el secretario de la Comisión de Educación de la Asamblea Legislativa, el panista Juan Carlos Zárraga, criticó la falta de determinación del jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, para retirar el plantón y permitir la celebración del Grito de Independencia.
“Ebrard tuvo miedo de que los chinos se enojaran por prestarle el Zócalo al Dalai Lama, pero no le da miedo que el SME lo tenga como tianguis”, cuestionó.
El asambleísta, quien ofrecerá el posicionamiento de su fracción en el quinto Informe de gobierno de Ebrard, pidió al Ejecutivo local que no “le tiemble la mano” para retirar al SME.
Algunas personas que asistieron al Zócalo también manifestaron su molestia por el campamento.
“Es un arma de dos filos: estorban y deberían quitarlos, pero moverlos puede ocasionar un conflicto mayor; preferimos que ahí se quede”, dijo un transeúnte.