enero 28, 2019
AUTOR: MARTIN ESPARZA
En el periodo de transición de 2012, a tres meses de concluir su gobierno, el panista Felipe Calderón Hinojosa envió al Congreso una iniciativa de reforma laboral con carácter de “preferente” que puso en alerta al sindicalismo independiente del país por los riesgos que implicaba a los derechos laborales de millones de trabajadores, esta imposición fue apoyada por legisladores del PRI.
Como sucedió de manera recurrente con el amasiato de neoliberales panistas y priístas, nunca se escuchó a los directamente afectados; es decir, a los trabajadores ni tampoco a los sindicatos y a los expertos en derecho laboral que advirtieron del franco retroceso que significaba aprobar de manera irresponsable una reforma con marcados tintes empresariales.
Un traje hecho a la medida de los intereses del capital que borró de un plumazo las conquistas laborales plasmadas en la Constitución de 1917 y que en su artículo 123 establece el derecho a huelga, a la seguridad social y un salario remunerador que permitiera a los trabajadores otorgar un nivel de vida decoroso a sus familias.
En la iniciativa de Calderón, mejor conocida en su momento como Ley Lozano por atribuirse la paternidad de tal estropicio jurídico al exsecretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, se dejaban intactos los cimientos del corporativismo priísta, así como la inmunidad de los contratos de protección y, en aras de flexibilizar el mercado laboral, se permitía la existencia de contratos de prueba y capacitación inicial, la legalización de las tercerizadoras y su modelo de encubierta esclavitud plasmado en las outsourcings.
Cuando de la mano de PRI y PAN votaron de forma mayoritaria por esta contrarreforma en perjuicio de millones de trabajadores, no tuvieron empacho en asegurar que se fomentarían empleos estables y bien remunerados, lo que fue una broma de mal gusto si se toma en cuenta que Calderón, el fallido presidente del empleo, se preocupó más por bañar de sangre al país en su guerra contra el narcotráfico, que en fomentar el trabajo digno y respetar las fuentes de empleo; la extinción de Luz y Fuerza del Centro, que envío de la noche a la mañana a la cesantía a 44 mil agremiados del SME, y el inesperado cierre de Mexicana de Aviación fueron dos de los casos más representativos que auguraban malos tiempos para la clase trabajadora del país.
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28 enero 2019
En pos de una verdadera reforma laboral
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Grupo de Ingenieros SME
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EL GRUPO DE INGENIEROS AGRADECE QUE TE INFORMES POR MEDIO DE ESTE ESPACIO, EL CUÁL IMPLEMENTAMOS COMO UN MEDIO DE COMUNICACION RESPONSABLE Y RESPETUOSO HACIA TODOS LOS AGREMIADOS DE NUESTRO GLORIOSO SINDICATO MEXICANO DE ELECTRICISTAS Y POBLACION EN GENERAL, POR TAL MOTIVO NUESTROS ARTICULOS ASI COMO LAS FUENTES DE INFORMACION SON REVISADOS Y EN SU CASO PUBLICADOS TENIENDO EN TODO MOMENTO LA MAYOR CLARIDAD POSIBLE, NUESTRO COMPROMISO ES Y SEGUIRA SIENDO INFORMAR DE MANERA VERAZ Y OPORTUNA, ASI COMO COADYUVAR AL FORTALECIMIENTO DEL SME PARA ALCANZAR NUESTROS JUSTOS OBJETIVOS EN ESTA DIGNA LUCHA.
"POR EL DERECHO Y LA JUSTICIA DEL TRABAJADOR"