Enrique Galván Ochoa
A pesar de los muchos discursos oficiales, México sigue estando dentro de los países más corruptos del orbe. Todavía peor: hoy es más corrupto que hace una década. Transparency International dio a conocer ayer sus calificaciones a casi 200 países del mundo. La de México es de 3.1, en escala de 0 a 10 puntos. Transparencyda seguimiento a nuestro país desde 1999, es decir, a lo largo de los pasados 12 años: dos del zedillato, seis del foximato y los cuatro de Calderón. La calificación del último año es la más baja de todas. Significa que todos los supuestos esfuerzos para combatir la corrupción no han dado buenos resultados. En esta página aparecen año con año las calificaciones. La mejor (3.7) se registró el primer año del foxismo. No se sostuvo. Ese primer año fue cuando se dejó escapar al Chapo Guzmán de la prisión de Puente Grande. La peor es la última. En mucho contribuyó el escándalo en la CFE, el turbio enjuague de los yates y los ferraris en que se encuentra involucrado un funcionario muy cercano a Alfredo Elías Ayub. Al primero se le dejó huir, al otro no se atreven a tocarlo ni con la hoja de un citatorio judicial. La Cámara de Diputados formó una comisión indagatoria, pero no se esperan grandes frutos.