Un estudio actuarial presentado en la ronda de conversaciones indica que para garantizar a 30 años el fondo de jubilaciones de todos los electricistas en retiro se requieren 40 mil millones de pesos.
El SME no está de acuerdo porque, asegura, desde 1934 existe dicho fondo, con el correspondiente registro contable, alimentado con aportaciones de la empresa (antes LFC) y de los trabajadores de la misma.
Lo que ellos no alcanzan a comprender es que no hay que erogar dinero extra, porque todo está en el fondo constituido desde 1934. Dicen que un trabajador (jubilado) vivirá en promedio entre 25 y 30 años más, por lo que actuarialmente hacen esa perspectiva de gasto, pero nosotros respondemos que el fondo ya existe, dijo Esparza.
El patrón, señaló, tiene la obligación de usar ese fondo para infraestructura, por lo cual el SAE (Servicio de Administración y Enajenación de Bienes, órgano liquidador de LFC) debe integrar todo el patrimonio de la extinta empresa para determinar en qué situación se encuentra el fondo de previsión social.
En entrevista comentó algunos de los aspectos de sus recientes conversaciones con Osorio Chong.
La semana pasada, el gobierno federal reconoció que la cantidad de 40 mil millones de pesos corresponde a una estimación actuarial, pero lo que no dicen es que ya existe un fondo, integrado con aportaciones de trabajadores. Ahí está la discusión, señaló.
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