A partir de este año, a algunas viviendas de la metrópoli no llegarán recibos de luz.
Los hogares que cuenten con equipos digitales, es decir medidores V-14, podrán medir su consumo de electricidad.
La CFE ya ha implementado un nuevo esquema denominado Pago Programado.
Con él, serán los mismos usuarios de las viviendas quienes, a partir del 2014, tomen la lectura del medidor para propósitos de facturación.
Bajo este esquema, la paraestatal ya no tendría que realizar dicha labor, ni distribuir los recibos en los domicilios adheridos al programa.
Para realizar el pago, los usuarios tendrán que utilizar una tarjeta personalizada que la CFE ya empezó a distribuir en algunos domicilios.
A fin de iniciar el proceso de pago, deberá colocar su tarjeta sobre el medidor durante 15 segundos.
Después, con tarjeta en mano, realizar su pago en algún centro de atención a clientes de CFE o a un CFEmático.
Al regresar a su domicilio, el usuario deberá poner su tarjera sobre el medidor para que se valide el pago.
De no hacerlo así, el servicio se cortará automáticamente.
Adherirse al sistema de Pago Programado de CFE no es obligatorio, indica Jorge Alberto Salazar, delegado de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en Nuevo León.
"El esquema busca adaptarse a las necesidades de pago del usuario; sin embargo, es opcional", advierte.
Clientes consultados señalan que pagar su consumo de electricidad se torna complejo.
Entre sus inconvenientes, opinan, está el que dicho proceso deberá realizarse cada mes.
Otra de las dificultades consiste en que el pago sólo podrá efectuarse en oficinas de la CFE y no en los establecimientos en los que hoy pueden hacerlo.
Las facturas, además, dejarán de repartirse en los domicilios que tengan equipos digitales.
"Ya no te llegará tu recibo de luz pero, al realizar tu recarga, se te expedirá un comprobante del pago realizado", indica la CFE en un tríptico promocional que distribuye.
La CFE ya ha implementado un nuevo esquema denominado Pago Programado.
Con él, serán los mismos usuarios de las viviendas quienes, a partir del 2014, tomen la lectura del medidor para propósitos de facturación.
Bajo este esquema, la paraestatal ya no tendría que realizar dicha labor, ni distribuir los recibos en los domicilios adheridos al programa.
Para realizar el pago, los usuarios tendrán que utilizar una tarjeta personalizada que la CFE ya empezó a distribuir en algunos domicilios.
A fin de iniciar el proceso de pago, deberá colocar su tarjeta sobre el medidor durante 15 segundos.
Después, con tarjeta en mano, realizar su pago en algún centro de atención a clientes de CFE o a un CFEmático.
Al regresar a su domicilio, el usuario deberá poner su tarjera sobre el medidor para que se valide el pago.
De no hacerlo así, el servicio se cortará automáticamente.
Adherirse al sistema de Pago Programado de CFE no es obligatorio, indica Jorge Alberto Salazar, delegado de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en Nuevo León.
"El esquema busca adaptarse a las necesidades de pago del usuario; sin embargo, es opcional", advierte.
Clientes consultados señalan que pagar su consumo de electricidad se torna complejo.
Entre sus inconvenientes, opinan, está el que dicho proceso deberá realizarse cada mes.
Otra de las dificultades consiste en que el pago sólo podrá efectuarse en oficinas de la CFE y no en los establecimientos en los que hoy pueden hacerlo.
Las facturas, además, dejarán de repartirse en los domicilios que tengan equipos digitales.
"Ya no te llegará tu recibo de luz pero, al realizar tu recarga, se te expedirá un comprobante del pago realizado", indica la CFE en un tríptico promocional que distribuye.