Sábado, 7 de enero de 2012 / 07:19
El empleado de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que milagrosamente se salvó de morir luego de recibir una descarga eléctrica cuando realizaba maniobras para cambiar una cuchilla a un transformador, aún permanece delicado, pero desafortunadamente le fueron amputados sus brazos.
El personal médico del Seguro Social que atiende a Maximino García Baldazo de 46 años de edad, residente del 31 Mina número 217, señalaron que éste ingresó al citado nosocomio el pasado martes presentando quemaduras de segundo y tercer grado en diversas partes del cuerpo.
Señalaron que García Baldazo ha ido evolucionando favorablemente, sin embargo las quemaduras que sufrió en las extremidades superiores fueron muy graves y ante el temor de que se fuera a complicar su situación no tuvieron más opción que amputarlas.
De acuerdo con los antecedentes de este caso, el accidente sucedió el referido día en punto de las 12:00 horas sobre la calle Eucalipto, entre las calles Mina Y Berriozábal, del fraccionamiento La Sierra.
Su compañero de trabajo dijo que éste se encontraba realizando las maniobras correspondientes para cambiar una cuchilla del transformador ubicado en ese punto, pero en un descuido de su parte hizo contacto con los cables conductores de la energía eléctrica y recibió una descarga de 13 mil voltios.
Fue tal la fuerza de la corriente, que lo lanzó fuera de la canastilla y cayó en el pavimento, en donde literalmente rebotó, quedando inconsciente por algunos segundos.
Dijo que de inmediato descendió él también y llamó al número de emergencias solicitando el apoyo de la Cruz Roja, trasladándolo de inmediato al referido nosocomio, en donde hacen todo lo posible por salvarle la vida.