Llegan a mexicalenses recibos de 15, 20, 28 mil pesos por energía y productos. Decenas de usuarios refieren que les llegaron cobros por avales que nunca firmaron y que ahora pretenden que paguen, bajo la amenaza del corte de energía y con esto emergen un sinfín de irregularidades para la aprobación de créditos al vapor.
Ex funcionarios del programa ASI, se asociaron con proveedores y se enriquecieron mientras los usuarios deben pagar por artefactos que no recibieron, que no avalaron. En la PROFECO, también hay denuncias. Sergio Haro Cordero Hasta la penúltima calle del fraccionamiento Valle de Puebla –más cercanos a los campos agrícolas que la tienda de la esquina– en la pequeñísima vivienda que habitan Héctor Daniel Contreras y su familia, llegó el recibo de la Comisión Federal de Electricidad. Al golpe mensual se le sumó otro más: 15 mil pesos por concepto de un aparato de refrigeración minisplit y un refrigerador que nunca compró.
Por las vueltas ante las dependencias para arreglar su problema, Contreras perdió su trabajo en la maquiladora. Ahora espera con temor que le corten la energía eléctrica, pero además no ha resuelto el asunto, ni sabe cómo hacerle, con adeudo de la casa, de una refrigeración que sí compró y, sin chamba.
