Erick Guerrero
Enésimo apagón persistió varias horas además de una baja y alta de tensión del fluido eléctrico que provoca daños en electrodomésticos, entorpece el trabajo de las personas y en los negocios, lo que no fue debidamente atendido por el personal de la CFE.
Vecinos de diversas colonias comentaron con periodistas de esta casa editorial su molestia sobre las fallas en el fluido eléctrico y la falta de atención inmediata de parte de personal de la Comisión Federal de electricidad además de que llegan a atender realizar reparaciones de manera somera que casi de inmediato luego de que “reparan” el fallo inician de nuevo los juegos pirotécnicos en los transformadores y siguen los apagones.
Colonias del sur de la ciudad así como del centro fraccionamientos como El Paraíso, y colonias como La Mesita, El Ocotal, Manantiales, etc., sufrieron durante horas el apagón que provocó largas filas de compradores en las cajas registradoras de los comercios de autoservicio, parálisis en las lavanderías, tortillerías, talleres mecánicos y otros comercios además de provocar problemas de estabilidad en la calidad de alimentos lácteos, pescaderías, carnes frías, etc.
Todo esto fue relatado por los comerciantes quienes dijeron que el personal de la CFE que mandan a reparar los problemas no logran, en los hechos, hacer un buen trabajo, ejemplo de esto el personal de un comercio de autoservicio en la colonia El Paraíso cuyos empleados dieron a conocer que el personal de la empresa eléctrica llegó para reparar los cables que chisporroteaban, lo que les llevó un buen tiempo, mas sin embargo a poco que dijeran que el problema estaba resuelto y se fueron, de nueva cuenta “algo” hizo corto circuito y todo volvió a quedar a oscuras.
Por vía de mientras instalaron una planta de luz portátil con el fin de poner a funcionar una caja registradora dado que una empleada se encontraba realizando las cuentas a mano, con una calculadora, mientras la cola de inquietos compradores se alargaba cada vez más.
Así, en diversos lugares de la ciudad la gente desespera debido, no tanto a la falta de energía eléctrica, que en este año en que fue extinguida la compañía de Luz y Fuerza han menudeado y casi se han vuelto, de un año a estas fechas, inveterada costumbre, pero es la dilación para atender los problemas lo que obliga a la gente a comparar el actual servicio con el anterior que prestaban los electricistas del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) y cuya diferencia hace añorar a los consumidores la malahora en que el presidente Calderón tuvo la “brillantez” de emitir un decreto no sólo lesivo a las decenas de miles de empleados que allí laboraban y dejó sin materia de trabajo, sino a la ciudadanía en general que tiene por fuerza padecer ineficiencias y rezagos en la atención de éste, no sólo prioritario servicio sino estratégico, que debe prestar el estado de manera adecuada, eficiente y con gran calidad.
