El punto fino, el eje, el epicentro de la reforma laboral planteada finalmente por la Secretaría del Trabajo, propone apretar las tuercas a los sindicatos, ya en rendición de cuentas; ya en cerrar el paso a los “paros locos” y huelgas en solidaridad, o en desterrar el llamado “escalafón ciego”
El anteproyecto se entregó en una reunión a puerta cerrada del titular de la dependencia, Javier Lozano Alarcón, con la bancada panista en el Senado, para ubicar objeciones o adiciones en la fase previa a la firma presidencial.
La ubicación de la Cámara Alta como puerta de entrada al Congreso no es casual. Se trata, naturalmente, de aprovechar la condición de primera minoría panista.
Y aunque las entrelíneas hablan de golpear a los sindicatos a quienes el gobierno ubica como “enemigos”, es decir el Minero o el Mexicano de Electricistas, y de pasadita la Unión Nacional de Trabajadores y el de la UNAM, parte de las esquirlas le pegarían al liderazgo venal, rapaz, del sindicalismo tradicional, léase Confederación de Trabajadores de México, Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación.
El anteproyecto se entregó en una reunión a puerta cerrada del titular de la dependencia, Javier Lozano Alarcón, con la bancada panista en el Senado, para ubicar objeciones o adiciones en la fase previa a la firma presidencial.
La ubicación de la Cámara Alta como puerta de entrada al Congreso no es casual. Se trata, naturalmente, de aprovechar la condición de primera minoría panista.
Y aunque las entrelíneas hablan de golpear a los sindicatos a quienes el gobierno ubica como “enemigos”, es decir el Minero o el Mexicano de Electricistas, y de pasadita la Unión Nacional de Trabajadores y el de la UNAM, parte de las esquirlas le pegarían al liderazgo venal, rapaz, del sindicalismo tradicional, léase Confederación de Trabajadores de México, Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación.