Mar, 02/03/2010 - 14:36
Derribaron las barreras colocadas por la ASE. Foto. Magali LópezMás de 300 ex trabajadores de Luz y Fuerza del Centro (LyFC) protagonizaron una serie de actos contra los asistentes a la ceremonia conmemorativa del 2 de Marzo, con la que el Estado de México celebró 186 años de su fundación.
Antes, durante y después de la ceremonia oficial los ex trabajadores arremetieron con piedras, huevos crudos, envases de vidrio y plástico contra quienes pretendían entrar al Teatro Morelos de Toluca.
Los más de 500 elementos de seguridad vestidos de civil y con uniforme resultaron insuficientes, pues más de 25 personas tuvieron que ser atendidas por golpes.
Los electricistas derribaron a empujones y patadas las llamadas Barreras de Pánico con las que los policías estatales intentaron frenar su marcha que pretendía ingresar al Teatro Morelos para impedir la realización de la ceremonia conmemorativa del 186 aniversario de la fundación del Estado de México.
Personal de la Secretaría General de Gobierno y diputados locales que los han apoyado en su movimiento, quienes incluso les rentan carpas para proteger el plantón de los electricistas frente a la Cámara de Diputados, trataron de entablar un diálogo con los violentos ex trabajadores de Luz y Fuerza; sin embargo, todo intento de frenar la manifestación resultó infructuoso.
Por estos hechos arribaron al Teatro Morelos de Toluca más de 500 elementos del Cuerpo de Granaderos de la Agencia de Seguridad Estatal, así como de otros cuerpos de reacción y acción para tratar de frenar a los supuestos electricistas.
Cuando los del SME se vieron superados en número y fueron advertidos que si no detenían sus acciones en contra de los asistentes a la ceremonia serían controlados por los uniformados, se alejaron de la explanada principal del teatro.
Finalmente, los del SME tomaron las calles de la zona centro de Toluca y bloquearon la circulación vehicular de las principales arterias viales como Sebastián Lerdo de Tejada, Nicolás Bravo, Benito Juárez e Independencia, lo que originó un gran caos vial en el primer cuadro de la capital mexiquense.
