Una trabajadora del ISSSTE encaró al Presidente al termino de un acto oficial para reclamarle que su marido se había quedado desempleado, a lo que le contestó que “puede trabajar nuevamente, si él lo decide”
Jorge Ramos/Enviado
El Universal
Tultitlán, Edomex
Jueves 04 de marzo de 2010
Elsa Ramírez, trabajadora del ISSSTE, encaró al presidente Felipe Calderón y le reclamó el despido del personal de la compañía de Luz y Fuerza del Centro, a lo que el mandatario le respondió que ellos pueden volver a trabajar si se deciden.
Al término de la inauguración del hospital Bicentenario del ISSSTE en este municipio se escuchaban los gritos en coro de asistentes al acto: "Felipe, Felipe, Felipe".
El titular del poder Ejecutivo federal caminaba sonriente saludando. De pronto, se escuchó el grito de Elsa: "No le quites el trabajo a los mexicanos, dales más, por favor. Nos dejas sin comer y sin estudio a nuestros hijos, por favor, por favor, atiéndeme".
Calderón volvió sobre sus pasos para hablar brevemente con la señora y le preguntó "¿Dónde trabajas?".
La señora Elsa le dijo que su marido era empleado de la extinta compañía de Luz y Fuerza del Centro.
-¿Pero usted dónde trabaja?, le insistió el Presidente.
-De luz y Fuerza, mi marido era gente honesta, cumplida, dijo Elsa.
-Pues puede trabajar nuevamente, si él lo decide, ¿usted trabaja aquí, no?, devolvió Calderón.
-Sí, dele un trabajo aquí, yo vengo con él, replicó la mujer.
El presidente se retiró.
En entrevista posterior Elsa dijo "Me da coraje porque necesita el trabajo la gente. Yo voté por él, yo voté por él, porqué deja sin comer a tanto mexicano, a tanto trabajador de Luz y Fuerza, ¿porqué? , no se vale, no se vale".
Jorge Ramos/Enviado
El Universal
Tultitlán, Edomex
Jueves 04 de marzo de 2010
Elsa Ramírez, trabajadora del ISSSTE, encaró al presidente Felipe Calderón y le reclamó el despido del personal de la compañía de Luz y Fuerza del Centro, a lo que el mandatario le respondió que ellos pueden volver a trabajar si se deciden.
Al término de la inauguración del hospital Bicentenario del ISSSTE en este municipio se escuchaban los gritos en coro de asistentes al acto: "Felipe, Felipe, Felipe".
El titular del poder Ejecutivo federal caminaba sonriente saludando. De pronto, se escuchó el grito de Elsa: "No le quites el trabajo a los mexicanos, dales más, por favor. Nos dejas sin comer y sin estudio a nuestros hijos, por favor, por favor, atiéndeme".
Calderón volvió sobre sus pasos para hablar brevemente con la señora y le preguntó "¿Dónde trabajas?".
La señora Elsa le dijo que su marido era empleado de la extinta compañía de Luz y Fuerza del Centro.
-¿Pero usted dónde trabaja?, le insistió el Presidente.
-De luz y Fuerza, mi marido era gente honesta, cumplida, dijo Elsa.
-Pues puede trabajar nuevamente, si él lo decide, ¿usted trabaja aquí, no?, devolvió Calderón.
-Sí, dele un trabajo aquí, yo vengo con él, replicó la mujer.
El presidente se retiró.
En entrevista posterior Elsa dijo "Me da coraje porque necesita el trabajo la gente. Yo voté por él, yo voté por él, porqué deja sin comer a tanto mexicano, a tanto trabajador de Luz y Fuerza, ¿porqué? , no se vale, no se vale".