Chilpancingo, 6 de marzo. Diversas organizaciones sociales, académicas, políticas y civiles que proponen un nuevo congreso Constituyente, durante la conmemoración del centenario de la Revolución Mexicana y el Bicentenario de la Independencia de México, acordaron este día apoyar al Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) el próximo 16 de marzo en su emplazamiento de huelga a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) con una marcha ese día en esta capital.
El integrante del gobierno legítimo, Iván Hernández Díaz, informó que las diversas organizaciones se reunieron hoy, como parte de los preparativos rumbo al Congreso Constituyente que está programado llevarse a cabo en la ciudad de México el próximo 20 de noviembre y como parte de su plan de acción acordaron el apoyo al SME para evitar la posible represión del gobierno de Felipe Calderón.
Otra decisión de las organizaciones que se reunieron hoy en el auditorio de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG) consiste en convocar al resto de las organizaciones a participar todos juntos en una gran marcha el próximo primero de mayo, Día del Trabajo, en esta ciudad.
Organizaciones como la CETEG, el Taller de Desarrollo Comunitario (Tadeco), el Comité de Familiares y Amigos de Desaparecidos, Secuestrados y Asesinados, la Asociación Cívica Nacional Revolucionaria (ACNR), entre otras, acordaron llamar a la huelga nacional para el 16 de marzo, día en que a los trabajadores electricistas se les vence su Contrato Colectivo de Trabajo.
Hernández Díaz expuso que ese día marcharán por las calles de la ciudad y llamarán a la población a sumarse a la huelga nacional para exigir al gobierno de Felipe Calderón dar marcha atrás en su declaración de extinción de Luz y Fuerza del Centro, decisión que dejó sin trabajo a unos de 45 mil empleados.
Este paso está previsto en el plan de acción nacional trazado por las organizaciones convocantes al nuevo Congreso Constituyente.
Las organizaciones convocantes consideran que los festejos del gobierno federal sobre el centenario y bicentenario son una farsa, una burla y un agravio a la historia y al pueblo mexicano, y se propusieron rescatar el sentido real de esta conmemoración popular.
